Municipales: continua la caída del poder adquisitivo

Los trabajadores municipales de varios municipios de la provincia de Buenos Aires están luchando por mejorar sus ingresos, los cuales en muchos casos se encuentran por debajo del umbral de la pobreza.

En Vicente López, se ha acordado un aumento del 80%, en La Matanza del 32.5% junto con una suma fija de 40 mil pesos, mientras que en Junín aceptaron un bono de 50 mil pesos y continuarán negociando en base a la inflación de febrero.

En Chacabuco, se ha alcanzado un acuerdo del 15% sobre el sueldo de febrero a pagar en marzo, más un 10% acumulativo en el siguiente salario, y una suma no remunerativa de 90 mil pesos a pagarse en dos partes. Estos acuerdos se suman al 30% obtenido recientemente por los trabajadores municipales de La Plata. Sin embargo, en Luján, el conflicto persiste, al igual que en San Antonio de Areco, donde se ha declarado la emergencia económica en Pinamar.

El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, enfatizó su compromiso con los trabajadores municipales y la justicia social, mientras que en Vicente López, se estableció un plan de pagos que incluye un aumento escalonado y un adelanto de la paritaria para que impacte en el medio aguinaldo.

En Luján, los trabajadores municipales han solicitado urgentemente la apertura de paritarias, argumentando que sus salarios son insuficientes para cubrir sus necesidades básicas. Mientras tanto, en San Antonio de Areco, el intendente Francisco Ratto ofrece un aumento que no satisface las demandas de los trabajadores, lo que ha generado medidas de fuerza.

En Pinamar, el nuevo intendente ha declarado la emergencia económica, social y financiera debido al pasivo dejado por la gestión anterior. A pesar de una mejor disposición por parte del nuevo gobierno municipal, los sindicatos locales siguen vigilantes.

Con el contexto de una inflación en aumento, los sindicatos municipales han estado presionando por una mejora en sus condiciones salariales desde 2023. En ese sentido, se ha discutido la posibilidad de establecer una paritaria nacional municipal para establecer un piso salarial, aunque hasta el momento esta medida no se ha concretado.

Sin embargo, la situación económica de los municipios se ve afectada por el abandono del gobierno nacional en áreas como la obra pública, la salud y la educación, así como por los recortes en la coparticipación, lo que dificulta aún más la recomposición salarial.

Los alcaldes han solicitado una reunión urgente con el presidente para abordar estos problemas, pero hasta ahora no han recibido respuesta.

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